Por Sin Reservas
El exministro de Agricultura, Tito Hernández, valoró de manera positiva el desempeño del sector en el 2022, al igual que el de los productores, de las autoridades y del país, aduciendo que ese 5 % de crecimiento en el agro, consignado por el Banco Central, representa el éxito toda la nación y de nuestro desarrollo agropecuario, en particular.
En este sentido, dijo que la verdad hay que decirla siempre, alegando que eso se traduce en más comida, como los 335 millones de quintales de alimentos producido; en más empleos, como las más de 400 mil ocupaciones generadas en el sector y en más recursos económicos, como los más de 320 mil millones de pesos que se generaron.
Expresó Hernández, que todo esos logros implican más bienestar para los hombres y mujeres del campo.
Hizo propicia la ocasión para enviar su reconocimiento al Presidente Abinader, “cuyo aporte al sector aumentó en el año 2022 de 15 mil a 27 mil millones de pesos en subsidios a los fertilizantes; al financiamiento agrícola a través de la tasa cero, a las importaciones (también a tasa cero) de unos RD$ 1,700 millones por ese concepto”.
El también exsenador por San Cristóbal, puntualizó que “debemos destacar, también, el aumento en el financiamiento al sector a través del Bagrícola, mismo que alcanzó la suma de más de 28 mil millones de pesos”.
Del mismo modo, precisó que debemos resaltar la reducción del índice del hambre en el país, que de acuerdo a la FAO, se redujo de 8.3 a 6.7, lo que es una disminución significativa, así como el aumento de las exportaciones en unos 2,600 millones de dólares, cifra que superó los US$ 2,300 del año anterior.
Al ponderar estos resultados, el exministro del área expresó que ello traza el camino hacia la autosuficiencia alimentaria en lo concerniente al agro, por lo que es oportuno reconocer, además, el trabajo de las autoridades del sector, encabezadas por el Ministro de Agricultura, Limber Cruz.
Tito Hernández, quien es ingeniero agrónomo hizo extensivo su reconocimiento a los productores agropecuarios en sentido general, por el trabajo incansable de seguir produciendo los alimentos que demanda la población dominicana, a pesar de las grandes adversidades del mundo de hoy, como lo son la crisis económica mundial y la guerra rusa-ucraniana.
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